El lupus eritematoso cutáneo (LEC) es una forma de lupus que afecta principalmente la piel. Esta enfermedad autoinmune provoca lesiones cutáneas inflamatorias que pueden variar en gravedad y localización. Aunque no siempre está asociado al lupus sistémico, algunos casos pueden coexistir con otras manifestaciones de la enfermedad.
¿Qué es el lupus eritematoso cutáneo?
El lupus eritematoso cutáneo es una condición que ocurre cuando el sistema inmunológico ataca las células de la piel, causando inflamación y lesiones características. Existen tres formas principales:
- Lupus cutáneo agudo:
- Asociado al lupus eritematoso sistémico.
- Lesiones en áreas expuestas al sol, como el rostro, con el característico «rash en alas de mariposa».
- Lupus cutáneo subagudo:
- Lesiones escamosas o anulares en el tronco y extremidades.
- A menudo inducido por la exposición al sol.
- Lupus cutáneo discoide:
- Lesiones redondas, engrosadas y cicatriciales que pueden provocar pérdida permanente de cabello si afectan el cuero cabelludo.
Causas del lupus eritematoso cutáneo
El LEC es una enfermedad autoinmune multifactorial con posibles desencadenantes:
- Factores genéticos:
- Predisposición hereditaria que afecta la regulación del sistema inmunológico.
- Factores ambientales:
- Exposición solar: Los rayos ultravioleta pueden activar las lesiones.
- Fármacos: Algunos medicamentos pueden inducir lupus cutáneo.
- Estrés: Puede exacerbar los brotes.
- Alteraciones inmunológicas:
- Disfunción del sistema inmune que ataca las células de la piel.
Síntomas del lupus eritematoso cutáneo
- Lesiones cutáneas: Pueden ser enrojecidas, escamosas, elevadas o ulceradas, dependiendo del tipo de LEC.
- Fotosensibilidad: Las lesiones aparecen o empeoran con la exposición al sol.
- Pérdida de cabello: Asociada a lesiones en el cuero cabelludo.
- Cambios de coloración: Puede haber hiperpigmentación o despigmentación residual.
- Picazón o dolor leve: En algunos casos.
Diagnóstico del lupus eritematoso cutáneo
El diagnóstico incluye:
- Historia clínica y examen físico:
- Identificación de las lesiones características y antecedentes familiares.
- Biopsia de piel:
- Confirmación mediante análisis histológico de las lesiones.
- Pruebas inmunológicas:
- ANA (anticuerpos antinucleares): Para evaluar la posibilidad de lupus sistémico.
- Anticuerpos específicos (anti-Ro/SSA, anti-La/SSB): En lupus subagudo.
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Tratamientos para el lupus eritematoso cutáneo
El tratamiento busca controlar los síntomas, reducir las lesiones y prevenir complicaciones. No olvide consultar con un especialista antes de realizar cualquier tipo de tratamiento.
Protección solar:
- Bloqueadores solares de amplio espectro: Uso diario de SPF 50 o superior.
- Ropa protectora: Sombreros y prendas de manga larga al aire libre.
Tratamientos tópicos:
- Corticoides tópicos: Reducen la inflamación de las lesiones.
- Inhibidores de calcineurina (tacrolimus, pimecrolimus): Alternativa para áreas sensibles.
Medicamentos orales:
- Antipalúdicos (hidroxicloroquina): Primera línea para casos persistentes.
- Inmunosupresores (metotrexato, micofenolato): Para casos graves o resistentes.
Fototerapia controlada:
- En algunos casos, la luz ultravioleta controlada puede ayudar.
Consejos para manejar el lupus eritematoso cutáneo
- Evita la exposición directa al sol: Incluso en días nublados.
- Sigue una rutina de cuidado de la piel: Usa productos suaves y evita irritantes.
- Consulta regularmente al dermatólogo: Para monitorear la evolución de las lesiones.
- Evita el estrés: Adopta técnicas de relajación como yoga o meditación.
Cuándo consultar a un dermatólogo
Consulta a un especialista si:
- Las lesiones cutáneas son persistentes o dolorosas.
- Notas una relación entre las lesiones y la exposición solar.
- Presentas otros síntomas como fatiga, fiebre o dolor articular.
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