La tiña corporis, también conocida como «tiña del cuerpo,» es una infección fúngica superficial que afecta la piel. Se caracteriza por lesiones circulares con bordes elevados que a menudo causan picazón. Esta afección es altamente contagiosa, pero fácilmente tratable con el enfoque adecuado. En este artículo exploramos las causas, síntomas y tratamientos más efectivos para la tiña corporis.
¿Qué es la tiña corporis?
La tiña corporis es una infección causada por hongos dermatofitos como Trichophyton, Microsporum y Epidermophyton. Aunque puede afectar cualquier parte del cuerpo, se limita principalmente a la piel glabra (sin pelo), excluyendo el cuero cabelludo, las manos, los pies y la ingle, que tienen sus propias variantes de tiña.
Causas y factores de riesgo
Causas principales:
- Infección por hongos dermatofitos que se alimentan de queratina.
- Transmisión por contacto directo con personas, animales o superficies infectadas.
Factores de riesgo:
- Climas cálidos y húmedos.
- Uso de ropa ajustada o sintética que favorece la humedad.
- Sistema inmunológico debilitado.
- Contacto cercano con animales infectados, especialmente gatos y perros.
- Compartir artículos personales como toallas o ropa.
Síntomas comunes
La tiña corporis se presenta con signos característicos:
- Lesiones circulares u ovaladas: Bordes elevados, rojos o escamosos con un centro más claro.
- Picazón intensa: Uno de los síntomas más molestos.
- Extensión de las lesiones: Las lesiones pueden crecer en tamaño o multiplicarse si no se tratan.
- Inflamación: En casos severos, las lesiones pueden volverse ampollosas o supurantes.
Diagnóstico
El diagnóstico de la tiña corporis generalmente se basa en un examen clínico.
Pruebas adicionales:
- Lámpara de Wood: Una luz especial que puede identificar hongos fluorescentes.
- Raspado de piel: Para observar hongos al microscopio.
- Cultivo micológico: Para confirmar el diagnóstico en casos resistentes o atípicos.
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Tratamientos para la tiña corporis
La tiña corporis suele responder bien a los tratamientos antifúngicos. No olvide consultar con un especialista antes de realizar cualquier tipo de tratamiento.
Tratamientos tópicos
- Cremas antifúngicas: Como clotrimazol, terbinafina o miconazol. Se aplican dos veces al día durante al menos 2-4 semanas.
- Polvos antifúngicos: Ideales para prevenir el exceso de humedad en la piel.
Tratamientos orales
- Antifúngicos sistémicos: Como terbinafina o itraconazol, indicados para infecciones graves, extensas o recurrentes.
Cuidados en casa
- Lava las áreas afectadas con agua tibia y jabón suave.
- Mantén la piel seca y limpia.
- Evita rascar las lesiones para prevenir la propagación.
Prevención de la tiña corporis
- Usa ropa transpirable y cámbiala si está húmeda.
- Evita compartir artículos personales como toallas o peines.
- Lava y desinfecta la ropa de cama y las superficies en contacto con lesiones.
- Limpia regularmente el pelaje de tus mascotas y consulta a un veterinario si notas lesiones en ellos.
Complicaciones si no se trata
Si no se trata, la tiña corporis puede:
- Extenderse a otras partes del cuerpo.
- Provocar infecciones bacterianas secundarias debido al rascado.
- Contagiarse a otras personas o mascotas cercanas.
Si tus síntomas persisten o empeoran, consulta a un dermatólogo para ajustar el tratamiento.
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