La hidrosadenitis supurativa (HS) es una enfermedad cutánea crónica, dolorosa e inflamatoria que se caracteriza por la aparición de nódulos profundos, abscesos y trayectos fistulosos en zonas del cuerpo donde hay pliegues, como las axilas, ingles o debajo de los senos. A menudo confundida con forúnculos o quistes, la HS es una condición debilitante que puede afectar considerablemente la calidad de vida de quien la padece.
En este artículo abordaremos qué es la hidrosadenitis supurativa, cuáles son sus causas, cómo se diagnostica y qué opciones de tratamiento existen hoy en día.
¿Qué es la hidrosadenitis supurativa?
La hidrosadenitis supurativa es una enfermedad inflamatoria crónica de la piel que afecta las glándulas apocrinas y los folículos pilosos. No es contagiosa, pero sí puede ser persistente y progresiva si no se trata adecuadamente.
Se manifiesta con la aparición de:
- Bultos dolorosos debajo de la piel
- Abscesos que pueden supurar
- Cicatrices y trayectos fistulosos en fases avanzadas
Las zonas más afectadas suelen ser:
- Axilas
- Ingle
- Glúteos
- Zona perianal
- Debajo de los senos
Causas y factores de riesgo
La causa exacta de la hidrosadenitis supurativa no se conoce con certeza, pero se cree que hay una combinación de factores genéticos, inmunológicos y hormonales.
Entre los factores de riesgo más comunes se incluyen:
- Predisposición genética (casos familiares)
- Sobrepeso u obesidad
- Tabaquismo
- Cambios hormonales (pubertad, menstruación)
- Ropa ajustada o fricción constante en la piel
No está causada por una infección bacteriana, aunque las lesiones pueden sobreinfectarse.
Síntomas principales
Los síntomas pueden variar según la gravedad, pero los más comunes son:
- Protuberancias dolorosas y rojas bajo la piel
- Lesiones que se abren y liberan pus con mal olor
- Puntos negros (comedones) agrupados
- Cicatrices profundas y endurecimiento de la piel
- Episodios recurrentes en las mismas zonas
Clasificación por estadios (Hurley)
- Hurley I: Abscesos aislados, sin cicatrices ni trayectos fistulosos
- Hurley II: Lesiones recurrentes con cicatrices y trayectos
- Hurley III: Lesiones extensas y múltiples áreas afectadas con fibrosis y trayectos conectados
Diagnóstico
El diagnóstico de HS es clínico, es decir, se basa en la historia del paciente y el examen físico. No existen pruebas específicas, pero a veces pueden hacerse cultivos para descartar infección secundaria o biopsias si hay dudas.
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Tratamientos disponibles
El tratamiento dependerá del estadio y la frecuencia de los brotes. Estos siempre serán pautados por un médico. En general, incluye:
1. Medidas generales
- Pérdida de peso si hay obesidad
- Dejar de fumar
- Usar ropa holgada y transpirable
- Evitar la depilación agresiva
2. Tratamiento médico
- Antibióticos tópicos u orales (como clindamicina o tetraciclinas)
- Retinoides orales (como isotretinoína)
- Corticoides en brotes inflamatorios
- Terapias hormonales (antiandrógenos) en mujeres con desequilibrios
3. Tratamientos biológicos
- Adalimumab (anti-TNFα) está aprobado para la HS moderada a grave
4. Cirugía
- Drenaje de abscesos
- Extirpación de zonas afectadas en casos severos
Pronóstico y seguimiento
La hidrosadenitis supurativa es crónica, pero con el tratamiento adecuado se puede controlar y mejorar. El seguimiento con un dermatólogo es fundamental para evitar el avance de la enfermedad y reducir el impacto en la calidad de vida.